Caracas.- José Peraza fue relacionado con los Orioles y los Indios, en tanto que interesó a otros dos equipos que no fueron identificados durante el receso de temporada, aunque el infielder reveló, en una entrevista con el Boston Globe, que en realidad se enteró que entre ocho y nueve clubes llegaron a estar interesados en sus servicios durante el mercado de agentes libres, pero se decidió por los Medias Rojas debido al éxito reciente del equipo.

“Es una excelente plaza para jugar beisbol, si quieres ganar un campeonato”, dijo el venezolano, de 25 años de edad, al periodista Peter Abraham.

Peraza cuenta poco más de cuatro temporadas y 520 juegos de experiencia en Grandes Ligas. En Boston lo ven como un defensor por encima del promedio, que es capaz de producir más a la ofensiva de lo que ha demostrado hasta ahora. Así que fue firmado con la esperanza de obtener algo de estabilidad a una posición que ha estado en constante cambio desde 2017, la última vez que Dustin Pedroia pudo jugar regularmente, antes de sus problemas de rodillas.

Peraza, que pactó por un año y 3 millones de dólares, asume la oportunidad como un reto.

“La segunda base es la posición en la que me siento más cómodo”, aseguró Peraza al Boston Globe. “Jugué mucho en esa posición en las menores. Sé que puedo ayudar al equipo allí”.

Peraza bateó para .288/.326/.416, con .742 de OPS, en 157 encuentros para los Rojos en 2018. Acumuló 49 extrabases hits, incluidos 14 jonrones, se robó 23 bases, anotó 85 veces y remolcó 58 rayitas. Ese es el jugador que esperan ver en Boston, después de un modesto 2019 en el que paulatinamente fue perdiendo tiempo de juego. Consumió poco más de la mitad de los turnos de la campaña anterior y su línea ofensiva se desplomó a .239/.285/.346.

“Sorprenderá a varios”, señaló Tim Hyers, instructor de bateadores de Boston. “José es un buen jugador. Pensamos que va a batear”.

Peraza también le ofrecerá a los Medias Rojas versatilidad. En Cincinnati apareció en 281 juegos en el shortstop, 173 en la intermedia, 60 en los jardines y cinco en tercera, incluso llegó a completar 1.1 innings como lanzador en dos desafíos. Pero la razón principal por la que ancló en el equipo de Nueva Inglaterra fue la segunda base.

“Pienso (que en 2019) se trató más de tiempo de juego, que de otra cosa”, afirmó. “No fue como en 2018, cuando tuve la oportunidad de salir de los slumps. Esa fue la gran diferencia. Traté de jugar de la misma manera. Pero eso es parte del beisbol. No siempre pasa como quieres”.

Ahora, mientras se adapta a un nuevo equipo, el criollo sólo mira hacia adelante.

“La comunicación aquí es buena. Es un ambiente familiar”, agregó. “Quiero mostrarle a la gente de Boston que puedo contribuir con este equipo (…) También quiero jugar en el Fenway Park. Lo estoy deseando”.