Valencia.- Al finalizar la octava semana de la ronda eliminatoria ningún jugador de posición en el roster de Navegantes del Magallanes será tan joven como Diego Velásquez. Por ese factor, el infielder no tiene reparos en admitir que es el primer sorprendido por el protagonismo que ha adquirido en fechas recientes.

A los 20 años de edad, el oriundo de Maracay ya deja constancia en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional de las cualidades que observaron los Gigantes de San Francisco apenas en 2021, cuando firmó al profesional como agente libre internacional por 900 mil dólares, el bono más alto de la organización aquella temporada.

“No pensé que me podían dar la oportunidad en Magallanes, por mi corta edad”, confesó Velásquez al periodista Carlos Valmore Rodríguez para la antesala de IVC Networks al duelo del viernes, contra Tigres de Aragua. “El equipo tiene muchos peloteros de experiencia, así que veía lejana la posibilidad de ingresar en el roster. Es increíble para mí”.

La alternativa de incluir al aragüeño no sólo en la nómina activa, sino también en el lineup, fue ganando cada vez mayor peso a medida que se acumulaban algunas malas noticias en el buque. José Peraza, habitual camarero, se lesionó; Carlos Rodríguez, primer bate y único zurdo de la alineación, se marchó; y a Luis Torrens se le unió un profundo slump con unas molestias físicas que le alejaron un par de días de la segunda base.

En ese escenario adverso, surgió Diego Velásquez, tal cual, como su homónimo español, para pintar turnos de calidad que fueron vistos como Las Meninas en el alto mando nauta, por la oportunidad que ofrecía de hacerlo a ambos lados del plato y como cabeza del lineup.

Diego Velásquez ha asumido la responsabilidad al campo en la segunda base

“A mí me gusta batear”, expresó con cierta inocencia el joven que compiló durante el 2023 en la Liga de California (categoría Clase A), la mayor cantidad de hits (127) y dobles (32), además del segundo mejor promedio de bateo (.298) entre los jugadores calificados. ”Eso es lo más divertido del beisbol, y por fortuna, también es mi fuerte”.

Velásquez dejó otra evidencia de su potencial con el madero al anotarse su primer juego de por vida en la pelota rentada local con al menos tres imparables el jueves, cuando sólo le faltó el jonrón para lograr la escalera frente a Bravos de Margarita, en el Estadio Universitario.

“Nunca me esperé pasar por un momento así, en el que nada más me faltó un jonrón para lograr el ciclo”, expresó. “Jamás se me había presentado la oportunidad de alcanzar algo así, y espero en algún momento tener el chance de nuevo para lograrlo. Cuando revisé el teléfono después del juego estaba impresionado por los mensajes.”.

Tantos instantes inesperados en tan corto período de tiempo tienen buena parte de su origen en la paciencia. El sábado 2 de diciembre negoció cuatro boletos frente a Bravos, en el último compromiso de Carlos Rodríguez, y también de Miguel Cairo, asentándose desde entonces como el primer bate del nuevo mánager, Ramón Hernández.

“Desde que comenzó mi carrera tanto mis coaches, como mi papá, me decían que tomara turnos de calidad y me divirtiera”, explicó Diego, refiriéndose tanto a los técnicos, como a su padre Jesús Velásquez, quien cumple funciones como entrenador físico de la galera, y tiene varios años ligado al club en diversos roles. “Mi papá lo es todo para mí. Él fue quien me entrenó desde muy pequeño. Sin él, yo no soy nada nada”.

EL DATO

Diego Velásquez está considerado el prospecto número 20 en el ranking de las mayores promesas de los Gigantes de San Francisco, de acuerdo con MLBPipeline. Su tasa de ponches en la reciente temporada, que disputó de principio a fin con el San José, sucursal Clase A, fue de 15,9 %, la quinta más baja de la Liga de California entre los jugadores calificados, según Fangraphs.